Posiblemente hayas enviado decenas o centenares de curriculums para conseguir por ti mismo una entrevista de trabajo.
Una vez conseguido esto ya tendremos la mitad del camino recorrido. Solo nos queda preparar bien la entrevista e investigar datos de la empresa en cuestión.
Durante y después de la entrevista lo normal es que intentemos sacar conclusiones sobre si la entrevista ha ido bien o mal, es decir, si nos van a contratar o no.
Es complicado saber la realidad y generalmente salimos con la impresión equivocada. En muchas ocasiones el resultado puede llegar a decepcionarnos cuando ya creíamos que estaba todo hecho.
Es completamente natural que estemos impacientes por saber una respuesta después de haber salido de una entrevista de trabajo, ya que la dedicación seguramente haya importante.
Por nuestra parte, podemos hacer hincapié en una serie de signos distintivos que puede hacer que salgas más tranquilo de una entrevista y con una idea más o menos clara de cuál podría ser la respuesta por parte de la empresa.
Tabla de contenido
Fíjate en el lenguaje corporal
Parece algo obvio, pero fijarse en esto puede darnos muchas pistas. El lenguaje corporal de la persona que tenemos en frente durante la entrevista es una fuente de información bastante fiable.
Por ejemplo, si presta atención a lo que dices, mantiene contacto visual contigo y muestra una sonrisa denotará que le resulta interesante lo que le estás diciendo. Hoy en día todo el mundo sabe distinguir si una sonrisa es genuina o está forzada.
También podemos fijarnos en la forma en la que está sentado, si tiene los brazos cruzados o no, etc.
Así que mantén los ojos bien abiertos en tu próxima entrevista de trabajo para captar estas señales.
La duración de la entrevista de trabajo
Si la entrevista acaba demasiado rápido puede ser que no haya ido del todo bien. Generalmente las empresas quieren sacar bastante información sobre los candidatos para elegir al mejor para el puesto.
Si ves que estás un tiempo considerable (más de lo normal) en una entrevista de trabajo es una buena señal, ya que a nadie le gusta perder su tiempo.
Conocer al resto equipo
Esta suele ser una señal definitiva en la mayoría de los casos.
Tras la entrevista, la empresa puede preguntarte si quieres ir a conocer al equipo de trabajo con el que vas a estar o conocer las instalaciones donde trabajarás.
Aunque en un principio pueda sorprenderte, sin duda es una buena señal, ya que quieren comprobar la forma en la que encajarías dentro del equipo humano.
Asegúrate de ser accesible y sonreír para demostrar que te vas a acoplar perfectamente a tu nuevo entorno de trabajo.
La disponibilidad
Aunque quizás no sea un signo definitivo, puede ayudar.
Lo normal es que si el entrevistador está interesado en contratarte te pregunte cuando te puedes incorporar a la empresa. Y seguramente te insista en que la incorporación debe ser lo más rápida posible.
Intenta no demorar mucho la incorporación al puesto de trabajo, lo normal suele estar en unos 15 días o 3 semanas.
A nadie le van a preguntar por su disponibilidad si no es un candidato a tener en cuenta.
Una segunda entrevista
Si durante la primera entrevista de trabajo te proponen volver a otra, entonces es una señal muy positiva.
Generalmente se suele tener una entrevista con una persona de recursos humanos, una vez pasado este primer filtro, lo normal es tener una segunda con el encargado del equipo.
Esta nueva entrevista suele ser más técnica. Asegúrate de llevarla bien preparada para no perder todo lo andado.
Planes de futuro
Es posible que el entrevistador nos comente y pregunte nuestro punto de vista sobre proyectos específicos que se están llevando a cabo en el área de la empresa en el cual se oferta el trabajo.
También pueden preguntarnos por cómo nos vemos a nosotros mismo en unos años.
Esta constituye una muy buena señal ya que quieren conocer nuestra visión particular sobre el proyecto en cuestión y esperan que le digas que vas a estar con la empresa durante un tiempo prolongado.
Respuestas largas a tus preguntas
Cuando nos toca hacer alguna pregunta y el entrevistador dedica un tiempo considerable a contestarlas es porque está invirtiendo su tiempo en ti y en aclararte las posibles dudas que te surjan.
Si te sucede esto, deberías estar más confiado al salir de la entrevista de trabajo, ya que hoy en día poca gente regala su tiempo.
Expectativas salariales
Que te pregunten en tu primera entrevista cuáles son tus expectativas salariales es un buen síntoma.
Este es un signo que denota que la empresa desea invertir en ti, así que piensa bien cuál es el rango salarial en el que te vas a mover. Intenta argumentar por qué te mereces ese sueldo y qué puedes aportar a la empresa.
Ponerse en contacto
No es la mejor señal, de hecho, muchas veces puede que ni se molesten en contestarte. Si es el típico “ya te llamaremos” la señal quizás no sea muy positiva.
Sin embargo, si te citan para un día concreto las perspectivas deberían ser más halagüeñas.
Aficiones personales
Al final de la entrevista, en un momento distendido con el entrevistador suele ser buena señal que se hable de las aficiones o se gaste alguna pequeña broma.
Si esto sucede quiere decir que has conectado bien con quien te ha hecho la entrevista de trabajo y que la relación entre ambos puede ser buena.
Con estas señales, no hace falta que se den todas a la vez, podrás eliminar gran parte de la incertidumbre generada tras la realización de una entrevista de trabajo.
Excelente pagina, muy buena información, gracias por compartirla!!